Autor: Arq. Liliana Gamonal Chauca
Categoría A: Arquitectura / Patrimonio / Memoria

Resumen:
La Casa Hacienda Garatea, está ubicada en el centro poblado La Huaca sector III, en el distrito de Santa. Para llegar solo basta unos 15 a 20 minutos desde Chimbote. Lleva el nombre del filántropo Nicolás de Garatea quien fue el administrador del lugar, en la época republicana. Y a quien se le atribuye el inicio y la reforma de la actividad agrícola del valle.
Tiene un valor arquitectónico, histórico, Urbano y tecnológico. Tiene materiales tradicionales del sector como: adobe, yeso, quincha y su entablado de madera, técnicas como la torta de barro como aislante. Que aún persisten en algunas viviendas aledañas de la ciudad.
En el año 2018 se declaró monumento integrante del Patrimonio Cultural de la Nación, bajo resolución viceministerial. Lo que le da mayor protección. Siendo un testimonio vivo del pasado histórico de la Costa Ancashina.
La Casona se encuentra en estado de abandono con bastante deterioro tanto interno como externo, que la acercan cada día más al colapso.

Palabra clave: Casa Hacienda Garatea, Patrimonio y Restauración.

«Al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver. Porque el tiempo no perdona, y lo que fue ya no es, por más que lo busques. Volver a ese sitio con la esperanza de revivir lo que sentiste es como querer atrapar el humo con las manos: imposible y frustrante.»- Joaquín Sabina

Al empezar a escribir no pude dejar de pensar en esta frase tan icónica, tan fulminante y a la vez tan frágil. El tiempo pasa; en calma, breve y traicionera. Cuando conocí por primera vez la casa Hacienda Garatea, lo primero que dije fue: debería ser restaurada, es bella, silenciosa y misteriosa.

Estar allí, parada al frente, fue mágico. Se sentía un aire fresco y un abrazo cálido que apachurra el corazón, y al mismo tiempo te da un bofetón para decir, el tiempo pasa, el instante, es solo eso, un instante.

Yo volví, volví aquel lugar donde sentí aquella primera impresión, donde por ese instante fui feliz a ver algo nuevo para mí, el olor a aire limpio, a tierra húmeda, a pasto recién cortado.
Volví, porque hay lugares que dejan heridas abiertas. Pensamientos constantes, de un ¿qué será?

Regrese, porque hay casas que dejen de ser casas, para ser historia. Muros que dejaron de ser muros, y se volvieron pulmones que respiran cada vez más lento, más despacio. Techos, piso y sus maderas se volvieron vertebras cansadas. Regresé porque cuando la vi por primera vez sentí su voz, sin sonido, sin prisa. Pero aun así con la entereza de tres siglos en un país que olvida.

No fue un error volver y comprender. Tal vez no se debe volver al lugar donde se fue feliz. Pero si puede volver a un lugar donde la historia pide auxilio, entre susurros del viento.

Cuatro años después de verla por primera vez fue declarada Monumento integrante del Patrimonio Cultural de la Nación, mediante la resolución viceministerial N° 242-2018 por su valor:
Arquitectónico, representada en su tipología única, en sus vistas amplias e imponentes a sus chacras y sembríos.
Urbano y Tecnológico, el tiempo la volvió hito y referente. Sus materiales y sistemas constructivos aún siguen presentes.
A pesar de su reconocimiento, no es ajena al abandono, a las miradas lascivas de sus visitantes, de sus gobernantes.

Lleva sobre sus cimientos 115 años, sobreviviendo al paso del tiempo, a los cambios climáticos, a la indiferencia que poco a poco merman el adobe, y causa cada día más estragos. Estragos que se sintió hace poco, con la caída de uno de sus muros del segundo piso.

¿Destino o casualidad?, asumo que un poco de ambas, fue coincidir con aquello, cuando llegué a tomar fotos y me encontré con esa escena. Un suspiro con pesadumbre salió desde el fondo de mi corazón.
¿Por qué nadie hace nada?, ¿Acaso alguna vez se intentó?, ¿Qué pasara? ¿Es que así debe ser su final?
Me niego a seguir pensando que su final será deshacerse lentamente, ver sus muros inclinarse cansados de tanto recordar sus épocas doradas y sus momentos más oscuros. Fue como si el valle me hubiese dicho: aquí estoy; no me he ido; pero estoy AGOTADA.
Entre el eco del pasado y muros agrietados, la quincha, el adobe y su entablonado de madera se sostienen ante el olvido. Sus grietas, muestran su autenticidad y la singularidad de sus materiales.

La caída de su muro, dejo atrás el impulso a la agricultura del valle de Santa, en épocas Republicanas.
Las pintadas en aerosol, son el grito de auxilio del olvido. Poco importa si es uno de los pocos testimonios de nuestro pasado; poco interesa, su valor y su legado.
Duele más la indiferencia y lo poco apreciada que puede ser ante ojos equivocados, que desconocen su origen.

“El que no conoce su historia está condenado a repetirla”
-George Santayana

Si el pueblo deja que su patrimonio desaparezca, repetirán el error de ignorar su raíz, su identidad, caerán en el olvido, indiferencia y perdida cultural. La información, la difusión URGE.

Mientras tanto la casa seguirá desplomándose en silencio.

Sus pisos cargados de memoria, crujientes de sueños y heridas de un pueblo. Cuantos antepasados habrán pasado por sus pasillos, cuantos miraron en sus terrazas, el inicio de los sembríos. Al atardecer perderse en el horizonte, contrastando con los regadíos diarios. La cosecha entre los hombros, el sudor y las manos encallecidas y ásperas del trabajo de campo, construyendo su ciudad.
Cuantos han pasado, cuantas historias se contaron, y cuantas se dejaron de contar. En qué momento, se volvieron indiferentes a su historia, a su pasado.

Su terraza, ni sus muros, quieren ser cruzados.

Ahora solo se muestra frágil, mirando los sembríos actuales, sola. Sin nadie encima de su entablado, sola, con su dignidad. Donde solo el viento entrar sin permiso, donde los rayos ingresan creando texturas ligeras y dejan ver el polvo flotar. La casa no exige ser tocada, exige ser escuchada.

Si la dejamos caer, perderemos vestigio, historia.

Allí parada frente a la fachada, sin entrar, me di cuenta que la restauración no es solo técnica, es ética, es política, es necesaria y al mismo tiempo es despreciada.

La casa hacienda es la raíz de una tierra fértil, su fragilidad actual, es la misma fragilidad del pueblo, de sus alrededores, que con todo y eso se sostienen ante tanto abandono.
Que se puede sentir si vivimos en un País, que pierde historia como si no valiera nada, la costumbre del abandono.

“cuando solo esté de moda si me caigo otra vez del escenario”
Ultimo Vals- Joaquín Sabina

Parece que solo se giran a ver, cuando se caen los muros, cuando se carcome el alma, pero mientras siga la fachada no hay problema ¿cierto?, ironía, de una frase escuchada. Los que valoramos la historia y encontramos la belleza en lo antiguo, en el paso del tiempo, sufrimos con lo falta de empatía y poco cuidado que se le da.

Irónico ver como un parque acaba de ser inaugurado a unos metros de su fachada, risas, juegos, paseos, miradas breves, la esquivan. Un nuevo brillo se implanto, mientras los muros esperan fielmente ser restaurados, cuidados, con esperanza de no ser completamente olvidada.

Ojo, no es malo, la integración de un nuevo espacio, las áreas verdes y zonas de juegos y descanso es necesario, para las nuevas generaciones.

El problema radica cuando no se busca una manera de conservar. Una casa hacienda de más de 100 años, solo es una, no tiene copia. Solo carga en su memoria el pasar del tiempo. Dejarla abandonada es condenarla al olvido dejar que lo irremplazable se desvanezca. La casa hacienda nos recuerda que fuimos, para saber que podemos llegar a ser.

Esta es mi forma de poder dar visualización a lo que tenemos en nuestra Provincia, mi manera de hacer algo, quizás ese algo, pueda ser el inicio de algún cambio.

Referencias Bibliográficas

• Bienes Culturales: Casa hacienda Garatea
• https://www.chimboteonline.com/threads/hacienda-nicol%C3%A1s-garatea.30/
• Nuevo Chimbote Informa
• https://www.facebook.com/100066886879406/posts/-alerta-casa-hacienda-garatea-patrimonio-cultural-de-la-naci%C3%B3n-se-derrumba-en-el/1152198947019657
• Por su puerto Noticias
• https://www.facebook.com/PorSuPuertoNoticiasChimbote/posts/-alerta-casa-hacienda-garatea-patrimonio-cultural-de-la-naci%C3%B3n-se-derrumba-en-el/1398697131958831/
• Preservación del Patrimonio
• https://es.scribd.com/presentation/344630520/Casa-Garatea-Exposicion-Final
• Resolución Directoral N°000012-2018/DGPC/VMPCOC/MC
• https://transparencia.cultura.gob.pe/sites/default/files/transparencia/2018/02/resoluciones-directorales/rd012-2018-dgpc.pdf